Los juegos de fútbol llevan años estancados, ya deberían ir a otro nivel en gráficos, ambientación y jugabilidad...bajo mi punto de vista no están a la altura de la generación.
Y la culpa creo que es de EA sports, que cuenta con los recursos para dar ese paso y no lo hace, acomodada por la falta de competencia de Konami, que apenas le quita mercado. A EA le basta con seguir manteniendo sus licencias para seguir acaparando el mercado.
Pes ha sido estos años casi para una minoría más purista que prefería su jugabilidad. Este año parece que ha espabilado algo y ha hecho una campaña más agresiva, robando alguna licencia importante y con el aliciente de la Eurocopa. Ojalá surta efecto y haga reaccionar a EA sports, porque si no seguiremos jugando a juegos de fútbol más propios de PS3.
Tienes toda la razón Diego. Los de EA es que no aman el futbol, van al negocio, negocio descarado desde mediados de la anterior generación los fifas se han convertido en correcalles y todo muy rollo fornite, con micropagos y niños ratas que lo gozan llegando en tres toques a porteria y marcando goles a lo globetrotters. El máximo interés es rellenar el album de estampitas de los jugadores más tops y ponerlos todos a jugar.
El Pes sigue premiando la estrategia, se ha intentado adaptar un poco a los tiempos con un futbol más adulto, con posibilidad en el mando de manejar jugadores en defensa con sticks, botones etc cada uno por su lado para hacer presiones conjuntas, pulir tu equipo para que responda a un patrón de juego y todo eso. Da verdadero gustazo que plantees un partido a lo que quieras jugar, te salga y anules al rival, ya sea replegando y friendo a contras o adelantar líneas y jugar a lo Sampaoli vigilando las salidas de los rivales. No obstante, podrían haber evolucionado mucho más y hacerlo más intuitivo pero no.
De todas formas, es tontería. Lo que vende, manda. Y lo que manda es que la mayoría de los usuarios de consola no quieren quebrarse mucho la cabeza y no tener que montarse un arrigo sacchi antes de cada partido y estudiar al rival, o renunciar al ataque por tramos de juego. Aquí lo que vende es las estampitas y niños rata jugando toda la tarde partido tras partido de 6-7 e insultar por el microfono al rival pegando berríos. La batalla está perdida, porque ellos son los que pagan los micropagos.