Pues puede ser, no te niego que el ir cumpliendo años te va haciendo cambiar de rollo y alternar sitios, pero que de verdad que de 2.003 o 2.004 en adelante uno se asombraba como podías estar más tranquilo en sitios que poco tiempo atrás eran zonas desmilitarizadas como el campo de la EM, o La Alameda, que empezó a "achuecarse" y predominaba el manfloro sobre el cani, o ya no se veían esas concentraciones de jauría motera que se citaban en la puerta del Burbujas y se organizaban para hacer rondas por todos Los Remedios buscando algún pijo distraído. Igual que dejó de temerse tanto al semaforazo ladrillero en la Avenida de la Paz. Quizás el fenómeno reduccionista que yo aprecio fue más de concentración en barrios muy barrios (por el tema Haze ese que me cuentas del que soy totalmente ignorante) y en esos sitios la cosa estaba más radicalizada.
Muchas veces he hablado con los amigos sobre todo el tema este y como la Sevilla nocturna se fue civilizando y algunos tienen la teoría de que la evolución del flamenquito como moda medio pija quitó mucho muelle de las tropas canis y los recicló y civilizó un poco, haciendo que estuviesen más a otras cosas que a robar y/o apalizar, no se.
Con lo que no puedo negociar, amigo @SluiFeC es que uno de los tramos históricos más violentos del tema cani fuese en los ultimos años de los 90. Ahí era algo verdaderamente gore, y los periodicos de la ciudad, sobre todo el ABC, eran de dos o tres portadas semanales señalando los peligros de la ciudad de noche. Ir al Capote en esa época era como ir a Kosovo casi.
Ya digo que un poco supongo que va por la edad porque yo la zona de la EM la empecé a pisar por 2006-2008 y seguía habiendo una fauna curiosa.
También yo me refiero al fenómeno cani, en el que en cualquier barrio te veías al grupito de chavales con sus muelles, el cuadrao, el puñito y los oros, y hasta el más mongolo intentaba dárselas de peligroso montado en el jog.
A nivel delincuencia es otra cosa y tampoco puedo comparar porque cuando tú dices yo tenía 9-10 años y no sé que había por la noche, aunque es verdad que se escuchaban cosas que daban miedo (Notre Dame en el cuore, que yo la tenía cerca de casa). Entonces en Santa Clara llegaban hordas casi a diario y es verdad que los chungos que para mí eran los 'grandes' de esa época han acabado algunos bastante mal y los de mi quinta ya no eran tan contundentes. Aunque bueno algunos ya eran colegas, pero se reformaron la mayoría.
Yo por eso ya digo que no sé si es que uno crece y deja esas mierdas atrás y esos ambientes o que realmente la cosa va a mejor. Porque en estos días no dejan de salir noticias de violencia nocturna de chavales y yo eso no lo veo cuando salgo.