Pues no estoy de acuerdo en casi nada, para variar. Lo de que de las adicciones a las drogas puedes cortar y alejarte de ese mundo en gran medida... es más difícil que alejarse de las redes sociales. Las redes te las quitas, adiós muy buenas. Yo me las quito y me las pongo cuando me da la gana. Me quité Facebook de un plumazo, Instagram de otro, y varios años después entré en Twitter, que para la gente de mi edad, creo que es el más adictivo. En el floro he estado en 3 etapas, parando años enteros. Y lo que dices de qu estarás obligado por temas laborales o familiares o eres un antisistema... Hay mucha más gente de la que se piensa sin usar redes sociales y mucho antisistema que las usa.
El alcohol, de las peores, por ser una droga psicodepresora, por su aceptación y por formar parte del día a día en todos los ámbitos, la tendrás alrededor toda tu vida. Las otras drogas no tanto porque no están en todos los ambientes. Alejándose de determinadas amistades, no vuelven a caer, si tienes superada la adicción física. Algunas de ellas no son difíciles a nivel físico, como la coca, que es más psicológica. Yo no he pasado de un par de porros y 10 cigarros con 15 años, pero sí he tenido familiares y buenos amigos enganchados.
Las adicciones se cortan progresivamente, las psicológicas incluso de raíz, pero siempre hasta llegar a 0 y alejarse definitivamente de ellas. Beber un poco, drogarse un poco, jugar un poco, cuando has sido adicto, no lo recomienda ningún adiccionólogo, toxicólogo o psiquiatra que haya conocido, y he conocido a unos cuantos, uno de ellos director de un centro de rehabilitación más de 10 años. Este amigo dice que se es adicto para toda la vida, y que la mejor y para él, lo único que funciona es alejarse totalmente. Que el que no lo hace recae siempre. Mi experiencia con familia, amigos y conocidos, es exáctamente esa. Los que han salido son los que se han apartado totalmente. No conozco uno sólo que haya podido convivir con un consumo moderado sin volver a caer. De absolutamente nada. Otro, fue un profesor de psicología del curso de entrenadores, toxicólogo reputado, que por deformación profesional, se pasaba las clases hablando de su profesión. Raro era el día que durante los 10 meses que duró el curso, no nos hablaba de sus clientes o su experiencia, y decía lo mismo, que no se podía convivir con las adicciones sin volver a caer. Decía que había incluso hecho mudarse de ciudad a clientes para salvar su vida o su familia, para que no pudieran ni cruzarse por casualidad con los lugares o personas con las que habían compartido adicciones. Y sí, como dices, y no se sabe muy bien por qué unas personas son más propensas a las adicciones que otras, no es fácil no pasar de una adicción a otras, pero que con esfuerzo y disciplina se puede, pero eso sí, sin medias tintas.