Cuando se habla de vírgenes, santos y demás, siempre recuerdo la anécdota de Javier Clemente, un crack.
Clemente y Lopera
«Hace poco me encontré a Lopera y le dije que era un forofo, que de fútbol ni idea. Le recuerdo un día rezando a las estampitas de la Macarena, pero jugábamos contra el Oviedo y le dije: ‘Tenga cuidado, que como ellos recen a la de Covadonga va a haber una pelea entre las vírgenes de la leche’ (risas). Era un hombre con sus creencias, muy devoto, pero un poco inclulto. Con alguien que futbolísticamente lo hubiera sabido conducir podría haber llegado lejos».