Me quiero acordar de Joaquín Caparros. Una verdadera lástima que a mitad de temporada se fuera a emprender otro proyecto y no haya podido disfrutar de poder conquistar su primer titulo como trabajador del club. Nos volvió a sacar las castañas del fuego los dos últimos años y se comió un marrón como director deportivo por su sevillismo. Una parte enorme de esto es de él.