No leáis este p*to tocho, me voy a desahogar un poco.
Mi opinión de esto es como cuando en una empresa ves que todas las decisiones que toma tu responsable terminan en fracaso, largan a un compañero con el que estabas bien pero al que tu responsable no le daba bola, los clientes ya no cuentan con el, ni lo llamaban, contratan a otro, empieza fuerte, los clientes contentos, al mes se ya va asimilando las ordenes del responsable y vuelve a ser lo mismo.
Ningún compañero cree en el responsable, en los almuerzos lo ponen verde, todos creen que haciéndolo así o asá se generarían más beneficios y que se están hartando de currar para nada, un muro, nada de aquel proyecto ilusionante que te contaron al contratarte.
Nadie con quien hablar, tu responsable es colega del de personal y no ves solución.
¿El dueño? el dueño no pinta nada, es un inútil pusilánime que se agarra al puesto porque en ninguna otra empresa lo querrían, ni el se explica como está ahí, solo mira las cuentas para ver si este verano se compra un barquito o renueva el renting del porche, deseando venderlo todo, pero no es solo suyo, ojalá, ni siquiera el que más tiene, es una empresa familiar fundada por los abuelos. Es en su mayoría de varios primos y muchos clientes que tienen un pequeño porcentaje. Cuando la crearon los abuelos, lo hicieron pensando que sería una especie cooperativa, sentimiento de pertenencia lo llamaban.
En el departamento, ya apenas quedan jóvenes con fuerza porque a la mínima oportunidad se han ido, quedan los quemados, o rebotados de otras empresas en las que estaban en situación similar. Ya lo asumen como normal, la única intención del que viene es llamar la atención de empresas que paguen más.
No hay para pagar sueldos de jóvenes que destacan en el sector, es un riesgo, nadie se cree ya el argumento del proyecto, el mundo ha cambiado.
Los de recursos humanos, que antaño se movían bien por facultades e institutos buscando jóvenes con talento, hace tiempo que están acomodados, por lo que sea, el jefe cree que ya no es tan interesante hacer este tipo de apuestas, también el departamento ha cambiado, muchos son amiguetes de aquel jefe de recursos humanos que antaño triunfaba en el sector, pero que con la modernización de las empresas de la competencia y la falta de inversión se le están viendo las costuras.
El presupuesto es el que es, la empresa necesita invertir, y podría hacerlo perfectamente, pero el dueño no se puede permitir perder poder y necesita esa pasta para hacer más grande su parte del pastel.
lo siendo, no llevo un buen día, no volverá a ocurrir.
