@Bleed, El problema y lo que os crea tanta frustración en las redes o foros, es que en persona o en público la gente sabe que son intocables y callan cuando escuchan la propaganda por miedo al escarnio y otros riesgos más.
Recuerdo una conversación con un grupo de norteamericanos, con varios españoles en un aula de cultura de la Universidad sobre el tema de palestina. Entre los españoles había varios de derecha y varios pro palestina. Una chica de origen judio estaba justificandolo desee el prisma del Éxodo de hace 2000 años. Cuando un pro palestino, educadamente le dijo que dónde parábamos la historia y le reprochó las colonias, se puso a lloriquear, como la del video, diciendo que es que ellos necesitan vivir en comunidad. Que es para ellos muy importante, bla, bla. Los americanos asintiendo con la cabeza y el resto callados, porque claro, llora y es una víctima histórica, y aunque lo que diga sea una chorrada o canallada, la gente calla.
Yo no estaba ni en la conversación porque aunque estaba con ellos, alguien me estaba hablando, y se lo dije. Eso no es un argumento, no sois diferentes a los demás. Todos necesitamos vivir en comunidad. Y ya empezó a hablar del holocausto para que cerrásemos la boca.
Y ese es el problema de los sionistas, que van con la churra fuera por el mundo. Y creen que no pasa nada incluso aunque te saltes toda la legislación internacional y bombardees ciudades, cortes luz, agua, etc. Pero esa contención forzada de la gente ante la injusticia produce el efecto contrario. Lo mismo pasa con el fenómeno de la inmigración descontrolada. Le imponen a la gente el que no puedan ni hablar de ella, o tapan las nacionalidades, justifican, etc. Y crea el efecto contrario. Creo que realmente es intencionado.
Lo que no se puede ser es racista ni generalizar y llamar criminales o terroristas a palestinos o israelitas por el hecho de serlo. Ni por tener determinados valores. Se juzga a la gente por lo que hace, no por lo que es o piensa. Como el racismo solo puede prosperar entre tarados, se tira de mentiras, genralizaciones y exageraciones sobre el otro, buscando entre lo peor de ellos, para justificar el racismo que uno tiene.