Supongo que las cosas ahora en el sas han cambiado, ¿no es asi?Buen tío. Tremendamente tosco en sus formas. El típico delegado de clase de biología o el que montaba un tinglado para retrasar un examen que solo él no se había estudiado.
Pero con un corazón grande. Tenía niños pequeños.
Yo creo que él perdió los papeles cuando vio a lo que podía aspirar como médico de familia en Granada si no ponía el **** al sistema. A la más mísera nada.
Y se rebeló contra los que organizaron un sistema de enriquecimiento de directivos elegidos a dedo que nunca trabajaron en las trincheras.
No es mi forma de ver las cosas pero comprendo que quisiera liderar una revolución contra el abuso silencioso de 30 años de SAS.
O serían ya más de 30 años aguantando ineptos gestores y manipulación política, ahora de los malaguitas