Ayer puse este mensaje en otro post
Y lo que dice Monchi de que siempre ha hecho lo mismo y unas veces funciona y ahora no, ES MENTIRA.
Alguna vez lo he expuesto y dejo tocho, que estoy con mi tostadita y me gusto.
Lo que se ha hecho aquí no se ha hecho en ningún club de futbol del mundo en el sigo XXI.
Punto.
Nadie, sin inversión extranjera, en una ciudad mediana, pequeña incluso si la comparamos con otras ciudades europeas, con además dos clubes parejos en masa social, sin la entrada de nadie externo y con fondos propios ha dado un giro tan radical en lo que se refiere a resultados en lo que va de siglo.
Cada vez que veo documentales de Amazon de tal o cual equipo me parto la polla en dos cuando lo pienso, aunque realmente lo nuestro debería formar parte más de una categoría de casos paranormales que de éxitos deportivos.
Para mí hay seis etapas bien diferenciadas con Monchi.
1 - La etapa de la tienda de los veinte duros: donde no teníamos más remedio que buscar un perfil muy concreto de jugadores a coste cero o casi gratis, unos con potencial de convertirse en grandes jugadores y otros veteranos que hicieran equipo.
Aquí podemos meter a Javi Navarro, David Castedo, Palop, Baptista, Alves, Adriano, Renato, LuisFa, Kanoute, Keita, Escudé, por poner ejemplos.
2 - La etapa oscura y desenfocada: donde era obvio que el consejo, liderado por DN, quitó protagonismo a la DD metiendo a grupos
demostradamente delictivos como Doyen en la compra de jugadores y llevándonos al caos absoluto, a la venta de estandartes como Navas y Negredo y a las dos peores posiciones en liga de la década.
Recordamos ejemplos de Rusescus, Kondogbia, Dabo, Cigarini, Tom de Mul, Manu del Moral, Babá, etc.
3 - La etapa del despertar de la fuerza: cambio de directiva por la entrada de DN al talego, los grupos y comisiones descaradas se diluyen y se vuelve a la senda de buscar gente con potencial y jugadores venidos a menos que puedan volver al estrellato aquí. Además se une una comunión fuerte entre DD y entrenador, cubriendo muy bien lo que el equipo necesitaba y con un perfil de jugadores muy marcado.
Parecido a la primera etapa pero con un salto económico mayor, lo que permite tener más margen de maniobra.
Es el caso de Banega, Reyes, Rakitic, Vitolo, Bacca, Iborra, Krycho, Konoplyanka, Marko Marin, Rami, Tremoulinas, por ejemplo.
4 - La etapa del cambio del Bilardismo al Menottismo: con los éxitos de los tres últimos años se decide dar una vuelta al estilo e ir más allá de ganar, también se quiere agradar. Eso se refleja en el estilo de entrenadores siguientes, con Sampaoli y Berizzo.
Con este cambio también cambia el estilo de jugadores, más técnicos, de trato de balón adecuado a la nueva corriente pero deficitarios en lo que respecta al físico, tan presente en la anterior etapa.
Ganso, Mudo Vazquez, Correa, Kiyotake, Sarabia, Nasri, como ejemplos.
Entonces, esgrimiendo estar quemado, aunque no se lo cree nadie, decide dejar el club e irse a Roma a buscar una nueva aventura.
5 - La etapa de la vuelta del hijo pródigo: después de irse a Roma, donde su método no funciona porque allí se creía que fichaban al rey Midas, vuelve con la promesa de mando en plaza, le crean un puesto en el organigrama de más responsabilidad y riendas para disponer de recursos económicos fuertes.
Remodela una plantilla que claramente estaba hecha a retazos, con grandes jugadores como Ben Yedder o Sarabia y morralla fichada sin plan alguno como Nolito, Arana, Pizarro, Gnagnon, Promes, Amadou, Aleix Vidal.
Vuelve a un sistema parecido, en el que se busca más físico, jugadores veteranos a bajo precio y jugadores con potencial para explotar pero, de nuevo, con un potencial económico nunca visto hasta la fecha.
Kounde, Diego Carlos, Fernando, Ocampos, Chicarito, Jordan.
6 - Y su última etapa, la del acomodamiento: en las anteriores etapas, cada temporada que pasaba se le daba una vuelta de tuerca más que la anterior a la plantilla y, de una manera u otra, siempre se conseguía tener un mejor equipo que la anterior.
Sin saber por qué, en esta etapa se decide dejar cojas posiciones ventana tras ventana de fichajes, siendo la de los centrales y los mediocentros algo sin explicación.
El estilo de fichajes basa todo su peso en jugadores donde prima el corte técnico sobre el físico y veteranos no revalorizables, y el perfil de jugadores con potencial es depreciado durante la actual etapa.
Papu, Rakitic, Isco, Tecatito, Delaney u Oscar e Idrissi son algunos de los ejemplos del perfil de esta etapa.
Y en esas estamos ahora, necesitando un nuevo cambio de rumbo en la estrategia de fichajes y con una necesidad imperiosa de tener un proyecto de equipo real hacia donde dirigirnos en el futuro que siente unas bases para que, si mañana se fuera Monchi, el que entre sepa qué tipo de equipo queremos y cómo lo queremos.
Eso facilitaría todo, conocer la inversión necesaria para alcanzar ese objetivo, tener claro el estilo de entrenador necesario para llegar ahí y evitar bandazos de estrategia en el futuro.
Ojala se siente a reflexionar y decida qué Sevilla queremos en 10 años y no decidir cual quiere cada temporada según el entrenador o plantilla que tenga porque el camino debe ser completamente el contrario, la sección deportiva es la que se tiene que adaptar al proyecto del Sevilla y no al revés.
