He estado hoy en las fiestas de Vallecas y la verdad que me lo he pasado como un enano. Nunca estuve tanto tiempo sin echarle un ojo al botellón sin que nadie intentase robar nada.
Eso sí, he visto mítines de partidos políticos con menos adoctrinamiento que las fiestas de Vallecas. Hasta estrofas de alguna canción alabando a Hezbollah ha habido. Muchisima tela.
Nunca me imaginé que unas fiestas populares, fuesen de donde fuesen, pudiesen ser así. Cuánto odio y rencor de gente que no tiene ni 30 años.
Ir a Vallecas y quejarse de politiqueo es como irte con una nigeriana del paseo marítimo de Fuengirola que la chupa por 20 pavos y quejarte de que te ha pasado la rarra aún poniéndote ocho condones.