Mbia: «El Sevilla FC siempre será mi segunda familia»El camerunés se fue este verano a Turquía como vino: sin hacer ruido; ayer, por fin, y desde Bélgica (país en el que está concentrado con su selección), habló con ABC de sus múltiples emociones...
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Por ROBERTO ARROCHA,
9 de octubre de 2015
1:53 h.
Stephane Mbia nunca fue un futbolista corriente. Ni siquiera una persona habitual. Cuando llegó al vestuario en el verano de 2013 con unos cascos tan grandes para escuchar una música cargada de fuertes ritmos más de un compañero buscó a otro «solicitando» miradas de complicidad. Llamó la atención muy pronto. Y no tanto por el tamaño y llamativo diseño de unos auriculares de última generación, sino por cómo se movía y gesticulaba con suma arte cada sonido el camerunés. Pronto se vio que era distinto. Con mirada frágil, capaz de emocionarse hasta puntos insospechados en alguien que llamaban en Francia «La roca» de Camerún, acababa de llegar a la ciudad hispalense alguien muy especial. Es posible, puestos a seguir estirando la épica y la capacidad extraordinaria de algunas personas por tocar los corazones, que el destino le tuviera guardado aquella imagen del 1 de mayo de 2014 apenas ocho meses después de desembarcar lleno de maletas en España: «Va a sacar Coke de banda, no queda tiempo. Sólo unos segundos para acabar el partido. Estamos en el minuto 93 y el Valencia se va a Turín a jugar la final de la Liga Europa… Saca Coke en largo para meter el balón en el área, la toca Fazio hacia atrás… ¡¡¡Mbia!!! ¡¡¡Mbia!!! ¡¡¡gol!!! ¡¡¡gol!!! ¡¡¡gol!!», fue el sonido de aquella noche mágica para el sevillismo protagonizada por Mbia.
El mediocentro se erigió en un héroe para siempre y decidió renovar su contrato a última hora con el Sevilla para alargar un noviazgo de grandes aventuras y máximas emociones. Finalmente jugaría 66 partidos. Pero este verano, después de muchos titubeos y cuando se podía esperar que el final fuera el mismo que el agosto anterior, es decir, continuar en el Sevilla, sorprendió a todos en pleno mes de junio cuando se enroló (no sin antes mucho suspense) en las filas del Trabzonspor. De repente, con la misma capacidad de sorpresa con la que actuó en aquella memorable semifinal ante el Valencia, apareció en el aeropuerto de Trabzon con una bufanda morada y azul en el cuello y comenzó a ser pasado del Sevilla.
De todo ello ha pasado algo más de 100 días, un tiempo en el que no ha podido o sabido dirigirse a la afición sevillista. Ayer, por fin y desde Bélgica, donde se encuentra concentrado con su selección, lo hizo con ABC como vehículo: «El Sevilla siempre será el club de referencia en mi carrera. Estuve en muchos equipos, pero lo que sentí en Sevilla fue tan especial que aún me emociona. Juntos ganamos dos títulos, algo, al menos para mí, impensable cuando Monchi me dijo que quería ficharme. Y juntos sentimos muchas cosas… La forma que se entiende el fútbol en el Sevilla, ese ambiente tan especial que se creaba entre los aficionados y los futbolistascada vez que jugábamos en nuestro estadio, lo condicionan todo. Lo que viví en Sevilla no sólo forma parte de mi carrera profesional, algo que también es importante si tenemos en cuenta que no todos los jugadores consiguen una cierta satisfacción competitiva, sino de mi vida. Hubo muchas emociones, una serie de circunstancias, y no sólo por el gol ante el Valencia, que se crearon y me dejaron para siempre con unos recuerdos imborrables».
Mbia siguió destacando el hilo emocional que se cosió con el club de Nervión en las dos temporadas que militó. «El Sevilla y Sevilla siempre serán mi segunda familia. La relación jugador-equipo se acabó, pero queda un sentimiento importante. Me marché porque lo que me presentó el Trabsonspor fue irrechazable. Me convencieron al explicarme el proyecto y dejarme muy claro que lo iban a dar todo para que pudiéramos conseguir los objetivos», fue desgranando el futbolista camerunés.
Mbia ha jugado siete partidos con su actual equipo (seis de la Liga turca y uno de la Liga Europa)y lo cierto es que no ha encontrado aún el equilibrio. El Trabzonspor, de hecho, ocupa la décima posición en la competición de la regularidad y sólo ha podido sumar diez puntos de 21 posibles. Ha ganado tres partidos, empatado uno y perdido otros tres. Mbia pidió tiempo en un escenario muy similar al que le está tocando vivir al equipo nervionense en este inicio de temporada (ocho puntos de 21). «¿El Sevilla? Es imposible que no se note un bajón con tantos cambios por temporada. Entiendo que el hecho de que se marcharan jugadores importantes trastoca algo la planificación. No es tan fácil. Recuerdo que cuando yo llegué nos pasó lo mismo. Acabábamos de llegar un montón de jugadores nuevos, muchos de distintas ligas, y necesitamos un tiempo para entender los conceptos que querían aplicar en el club. No hablo de que un futbolista se haya olvidado de jugar al fútbol, hablo de la necesidad de que se conozcan entre ellos y se llegue a jugar, otra vez, casi de memoria. ¿Que Krychowiak me echa de menos? No, no… (se ríe). Lo que pasa es lo mismo, que requiere un tiempo para conocer a los compañeros. El fútbol y sus ideas no son inmediatas. Pero estoy convencido de que muy pronto el Sevilla volverá a coger su camino y no parará. Yo creo, sinceramente, que se ha fichado bien y confío en los jugadores. Los conozco y sé lo que pueden dar. El ambiente mágico del Sánchez-Pizjuán ya salió ante el Barcelona.Ahora lo que hay que hacer es que no se apague y continuar y continuar…».
http://sevilla.abc.es/deportes/orgullodenervion/noticias/sevilla-fc/mbia-el-sevilla-fc-siempre-sera-mi-segunda-familia-91477-1444326987.html
No es una entrevista suya al uso, pero siempre deja alguna pincelada.